La Fundación ANAR ha presentado este pasado martes 17 de mayo, en el Congreso de los Diputados, su Informe Anual del Teléfono/Chat 2021, realizado por su Centro de Estudios e Investigación a partir de las 251.118 peticiones de ayuda recibidas a lo largo del pasado año. La comparecencia, a instancias de la Comisión de Derechos de Infancia y Adolescencia, ha permitido al director de Programas de ANAR, Benjamín Ballesteros, destacar el alarmante repunte de los problemas de salud mental de los más jóvenes, a raíz de la pandemia, que representaron este pasado año el 32,5% de las peticiones totales de ayuda de niños, niñas y adolescentes y han supuesto un incremento del 54,6% respecto a 2020.
Ballesteros ha señalado “el fenómeno de la soledad acompañada” que provoca el uso de la tecnología en los más jóvenes como uno de los detonantes del incremento de consultas por ideas suicidas, intentos de suicidio y autolesiones, que representó la cifra de 7.770 peticiones de ayuda, lo que significa que se han multiplicado por 18,8 en la última década. Gracias a la intervención de ANAR ha podido salvarse la vida a 4.542 niños, niñas y adolescentes.
Las autolesiones se han multiplicado por 56 en los últimos 13 años (con una tasa de crecimiento de +5.514%), pasando de 57 casos atendidos a través de las Líneas de Ayuda en 2009 a 3.200 en 2021.
La violencia sigue siendo, sin embargo, el principal motivo de consulta, pasando de atender 6.259 casos graves en 2020 a 8.565 casos graves en el año 2021 (+36,8%).
Por su parte, los trastornos de alimentación crecieron un 154,7% en 2021, el duelo un 138,9%, los síntomas depresivos/tristeza un 31,5%, las adicciones un 41%, la baja autoestima un 27,9% y la ansiedad un 25,6%.
Respecto a la violencia contra los menores de edad, principal motivo de llamada a las Líneas de Ayuda ANAR, Ballesteros ha destacado cómo no sólo es preocupante el aumento de casos (8.565) sino también la gravedad, urgencia, duración y frecuencia de los mismos. Todos estos parámetros han empeorado de forma significativa, a la vez que se ha incrementado un 36,8% el número de menores de edad atendidos por esta causa.
En cuanto a los casos de abusos sexuales, la Fundación ANAR ha pasado de atender 717 casos en 2020 a 1.297 casos en 2021, lo que supone un incremento del 80,9%.
Las víctimas de violencia de género menores de edad ayudadas en la Fundación ANAR han experimentado en el último año un incremento del 49,5%, afectando a 3.440 adolescentes. Cabe destacar al respecto que el 43,6% de ellas no eran conscientes de estar sufriéndola, por lo que el director de Programas de ANAR ha recalcado la importancia de seguir sensibilizando sobre violencia de género y que “aún queda mucho por hacer”.
Igualmente, Benjamín Ballesteros ha recordado la importancia de implantar la figura del coordinador/a de bienestar en los colegios, tal y como prescribe la Ley Orgánica de Protección Integral a la Infancia y la Adolescencia frente a la Violencia (LOPIVI) como una medida necesaria para abordar problemáticas que afecten a los menores de edad.
Los grupos parlamentarios han reconocido la importante labor que viene realizando la Fundación ANAR desde hace 52 años en la atención y protección a la infancia y la adolescencia en riesgo.